Si eres lector nuevo & te gustó mi novela, mandame un reply/mención a mi cuenta de twitter, @RosselyJonas, diciendome que la lees, así te avisaré cuando suba capítulo.

domingo, 30 de septiembre de 2012

Capítulo 39 - Amigo mio.

Ha sido difícil aguantar este golpe al corazón, cómo soportar la realidad sobre todo este dolor.

Narrador
 
Cuando Joe pensó que salía victorioso de esto, fué cuando Patrick más miedo le dió... el hombre de una cicatriz en la mejilla a causa de una cortada con navaja en una discusión con su ex esposa, tenía sujetada a Rossely, amenazandola con dispararle si Joseph o los chicos hacian algo en su contra...
 
- Tranquilo, tranquilo... - dijo Joe levantando las manos.
 
- Pongan las armas en el piso. - Ordenó Patrick... e indicó a ssus complices que se las llevaran de ahí.
 
- Escucha, hablemos, arreglemos eso, no hay porque llegar a la violencia. - Pidió Nathan tratando de sonar pacífico.
 
- ¡Eso no era lo que creían en el parque! ¿NO?. - Intervino Max.
 
P: ¿Traen el dinero?.
 
- No, se quedó en el Central Park. - Mintió Leo.
 
- ¿Qué? ¿Como que se quedó ahí? ¿acaso están idiotas?. - Reprendió el Jefe sin dejar de apuntar a la chica.
 
J: Ese dinero ya no era nuestro, ustedes nos lo pidieron y se lo dimos a tus amigos, solo que por miedosos salieron corriendo y lo dejaron olvidado.
 
P: ¡MALDITOS IMBECILES! - Gritó y de la rabia al saber que "su" dinero estaba perdido, le disparó en la cabeza a Max. Lucas se asustó mucho cuando vió la acción, estuvo a punto de agacharse a ayudar a su amigo, pero sabía que si lo hacía, tambien corria peligro de sufrir esas consecuencias.
 
Ahora todos se encontraban con miedo y a la expectativa, después de esto, supieron que Patrick si era capáz de matar...
 
P: Y si no se comportan la que sigue es ella.
 
- Por favor, ya dejennos ir... ¿no entiende que no conseguirá nada matandome?. - Pidió Rossely al borde del llanto.
 
J: Patrick... te puedo dar todo el dinero que me pidas, prometemos no denunciarlos ni hacer nada en su contra, solo, devuelveme a Rossely.
 
- ¿Dinero? Eso era solo parte del protocolo de un secuestro, la verdadera finalidad de esto es... - comenzó a olfatear la oreja de Rossy, para después pasar el arma por su pecho, cuello y rostro suciamente... - Matarla.
 
- Sueltala imbecil. - susurró Joe furioso, al ver la forma lujuriosa en que le hacía eso a su chica.
 
- ¿COMO ME HAS LLAMADO?. - Reprendió Patrick apuntandole.
 
- ¡NO, NO POR FAVOR!. - Gritaba Evans desesperada.
 
Sin tocarse el corazón... el hombre de la cicatriz... disparó... pero como si todo fuese en cámara lenta, Nathan se puso frente a Joe y fué él... quien recibió... el balazo.
 
J: ¡¡¡NATHAN!!!
 
L: ¡¡¡NO!!!
 
R: ¡¡¡NO!!!
 
El grito de los tres chicos se escuchó en toda Nueva York... mientras que la risa de victoria de Patrick era la aguja en el pajar.
 
Joseph detuvo la caída de su mejor amigo y con lagrimas en los ojos, al igual que Leonardo, lo recostaron en el suelo... la bala le había dado en el pecho, muy, pero muy cerca de su corazón...
 
- Amigo... - susurró el herido. - tien...es que... salvarla... a ella... a tu bebé...
 
J: Saldremos de aquí los 5... - respondió llorando.
 
- Nath, estarás bien...te lo prometo. - Agregó de la misma forma Leo.
 
- Di...ganle a... Jenni que... la amo...
 
J: No, Nathan no hables así... regresaremos a... a la casa y tu seras quien se lo diga ¿de acuerdo?
 
Desafortunadamente... Nat, sabía que no era así... y en el fondo... sus amigos... igual.
 
- Los ad...oro, herma...nos. - Esas... esas fueron sus ultimas palabras... sus ojos se cerraron lentamente y después de un suspiro... ¡murió!.
 
J: ¡¡¡NO, NATHAN,  DESPIERTA!!!
 
L: ¡¡¡HERMANO, NO TE VALLAS, ABRE LOS MALDITOS OJOS, NATHAN!!!
 
No había nada más que hacer, el chico ya había dejado la tierra para ingresar al cielo... el dolor y la rabía ahora eran estaban más presentes que nunca... el coraje se apoderó desenfrenadamente del cuerpo de Joseph, ocasionado que...
 
J: ¡TODO ESTO ES POR TU CULPA!. - Gritó acercandose amenzadoramente a Patrick. - ¡ERES UN ASESINO!
 
- Si te acercas más la mato. - amenazó.
 
- No, tu no matarás a nadie más. - intervino Lucas... asombrosamente... apuntandole a su "Jefe".
 
P: ¿Qué crees que estás haciendo Luquita?. - La mirada y la forma de hablar fría de su complice, asombró a Patrick, nunca antes había hecho esto, NUNCA.
 
Luc: Darte una cucharada de tu propia medicina.
 
P: ¿Qué?
 
Luc: Mi papá no merecía morir.
 
P: Ay, por Dios, no comiences otra vez, entiende que te salvé la vida.
 
L: ¡¡QUITANDOSELA A MI PADRE!! Hubiese preferido ir a la cárcel antes de que ¡¡TU LO MATARAS!!
 
P: ¡¡ESO NO LO QUERIAS EN ESE MOMENTO LUCAS, ASI QUE CALLATE, LO HECHO, HECHO ESTÁ!!
 
Lucas apuntaba firmemente a Patrick, sus ojos se llenaban de lagrimas con cada palabra pero era lo suficientemente fuerte para soportarlo, su voz era triste pero fría a la vez... Joe, Leonardo y Rossely, estaban estupefáctos a tales acciones... la pelea parecía volverse personal.
 
P: ¿Crees que me das miedo niñito mal-agradecido?
 
Luc: Vengaré la muerte de mi papá. - Una pequeña risa burlona salió de la boca de Patrick...
 
P: ¿De verdad crees que podrás dispararme? ¡¡TU NO ERES MÁS QUE UNA VIL MIERDA COMO LO FUÉ TU PADRE!!
 
Narra Joe
 
Cuando el dijo eso, miré a Lucas, percatandome de sus intenciones, así que aproveché la distracción de Patrick y  jalé a Rossely de sus brazos y la cobijé con los míos, acto seguido... se escucharon dos disparos.
Esperamos unos segundos, miramos a Leonardo cubriendose con sus manos sobreNathan... Lucas estaba de pié llorando, viendo hacia el piso, en donde yacía el cuerpo inmóvil de Patrick, con dos impactos de bala, uno enmedio del estómago y otro más abajo, cerca de la costilla derecha... estaba muerto. El último secuestrador vivo, estaba que no creía lo que había hecho, al igual que nosotros, de repente, nos apuntó... lo miré fijamente poniendome frente a Rossely... sus ojos estaban llenos de lagrimas, de dolor, pero también de sufrimiento, sabía que lo que había pasado le dolía muchísimo, fué por eso que no hice el mínimo intento de golpearlo para desarmarlo... pero sorprendentemente... bajó los brazos.

- Creí que ibas a dispararme. - Conté con espectativa.

- ¿Sí? Yo también.

- ¿El... el mató a tu padre?. - Cuestioné tímido.

- Sí... y por consiguiente, a mi madre.

Solo asentí con la cabeza, no me atreví a decirle nada más...

- Llamaré a la policia, voy a entregarme. - Dijo friamente.

- ¿De verdad?.

- Sí y siento mucho haberles causado tanto daño.

- Un lo siento no traerá de vuelta a Nathan. - Intervino Leonardo.

- Nathan. - Susurró Rossely.

Ambos fuimos hacia ellos poniendonos a su altura... comenzamos a llorar por la perdida de un gran ser humano, de un gran amigo, de un excelente hermano...

Narrador

3O minutos después

Luces azules y rojas provenientes de las torretas de 2 ambulancia y 3 patrullas que se encontraban estacionadas en el lugar de los hechos.
Lucas ya se encontraba en uno de los autos de los oficiales, mientras que Leonardo, Rossely y Joe, veían como dos doctores subían el cuerpo ya frío de Nathan, el cual, después, cubrieron de pies a cabeza con una delgada sabana blanca... y los otros medicos, se encargaron de Max y Patrick.

- ¿Qué se harán con los cuerpos?. - Cuestionó un hombre de bata blanca y un cubrebocas azul cubriendo su cuello.

- Le pediré que aliste el cuerpo de él para el entierro mañana. - Explicó Joe refiriendose a su amigo fallecido.

- ¿Y él de los otros dos?.

- Haganse cargo ustedes de ellos. - Pidió friamente. 
La verdad es que a Joe no le parecía ser tan duro pero ellos le habían hecho mucho daño, Patrick casi mataba al amor de su vida y Maxi casi lo mata. Así que solo le dió unos cuantos billetes para que llevaran el papeleo de sus entierros y todo eso.

~~~

Los tres chicos se encontraban cerca del auto de Nathan, observando como las autoridades se alejaban de ese sitio... ¿Cómo sería su vida ahora sin su mejor amigo? ¿Podrían recuperarse de esta enorme perdida? ¿Podrían volver a ser los mismos? ¿Quién iba a luchar para sacarles una sonrisa cuando estuviesen enojados? ¿Quien los ayudaria en los peores momentos? ¡¡¿QUIEN?!!.
En ese momento, por impulso, todos miraron al cielo... en donde el brillo de una enorme estrella acaparó su atención... sonrieron ante eso porque sabían que a pesar de este dolor y que a partir de ahora, tendrían en el cielo a un angel que los cuidara en todo momento.

- ¡Buen viaje, amigo mío!. - Susurró Joe con lagrimas en los ojos... - ¡Nos vemos pronto!.

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¡CHICAS, ESTE DEFINITIVAMENTE ES UNO DE LOS CAPIS MÁS TRISTES QUE HE ESCRITO! LLORE, LLORE CON CADA PALABRA QUE ESCRIBÍA, SE LOS JURO... REALMENTE ESPERO QUE LES GUSTE, LO ESCRIBI CON MUCHO SENTIMIENTO... Y SI ALGUNAS RECUERDAN, CAPÍTULOS ATRÁS LES CONTÉ QUE HABÍA FALLECIDO UN AMIGO MIO Y ESTO ME RECORDÓ A EL, ES POR ESO ME IDENTIFICO MUCHO CON ESTE CAPÍTULO.

¡¡COMENTEN POR FAVOR!! Gracias, bendiciones, las quiero. xx

 

jueves, 27 de septiembre de 2012

Capítulo 38 - oh oh.

Cuando hay amor verdadero, perder tu vida con tal de salvar la de la persona que quieres, es lo menos que te preocupa.

Narrador
 
Son las 10:00 p.m, la tensión en el departamento de Joe está al rojo vivo, pues como recordaran, Patrick le dijo que a esta hora le llamaría para darle indicaciones sobre el dinero, el cual, ya tienen completo.
Los 4 amigos están sentados en la sala, todos observando con nerviosismo desesparación el celular de Joe, que yace sobre la mesita de centro, a un lado, un maletín negro con el contenido pedido por los secuestradores... los segundos parecían minutos, nadie veía la hora de que les llamasen para decirles que tendrian a Rossely de vuelta muy pronto... y cuando menos lo pensaban, el teléfono sonó.
 
- ¿Tienen el dinero?. - Fué lo primero que preguntaron.
 
- Sí, está todo. - Explicó Joseph.
 
- Así me gusta. - Una risa de satisfacción se escuchó al otro lado de la bocina, esto era algo que Joe detestaba, la forma burlona en que lo hacían, sin saber que eso le causa mucho dolor a otras personas... pero no dijo nada, se tragó su rabia, pues no quería que por culpa de sus acciones, su chica pagara.
 
- Dime que tenemos que hacer, dimelo ya, por favor. - Pidió tratando de no sonar alterado.
 
- En la madrugada, a las 3:00 a.m, irás al central park, al otro lado del lago, habrá una caja blanca, simulando ser bote de basura, ahí pondrás el dinero, el cual quiero que lleves en bolsas de basura...¿entiendes? - explicó detalladamente.
 
- Sí, sí, pero dime, ¿en dónde estará Rossely?.
 
- En el mismo bote, hasta el fondo, encontrarás una nota con la dirección del lugar en donde la dejaremos para que pases por ella, pero eso lo harás hasta mañana en la tarde, a las 5:00 p.m ¿ok?.
 
- ¿HASTA MAÑANA? DEMONIOS, TE ENTREGARÉ EL DINERO ESTA MADRUGADA, ENTREGAME A ROSSELY A ESA MISMA HORA...
 
- ¡AQUI SE HACE LO QUE YO DIGO Y PUNTO! ¿QUEDÓ CLARO?.
 
- Sí pero es que...

- Pero nada, ya dije... ah, y otra cosa, no nos quieras dar una sorpresita llevando a la policia porque si lo haces, tu noviesita ¡¡se muere!!. - Indicó sinicamente, posteriormente colgó... las últimas palabras de Patrick hicieron que el miedo aumentara más.

Le contó a los demás lo que le habían dicho y con las palabras 'todo saldrá bien' lograron tranquilizarlo un poco, así, planearon lo que harían... al principio, Joe se negó, no quería arriesgar a Rossely pero después lo convencieron diciendole 'El que no arriesga no gana'.

Ahora todo estaba listo, solo tenían que esperar a que llegara la hora para entrar en acción.

~~

2:45 a.m

- Es hora chicos. - Mencionó Joseph.

- ¿Tienen todo listo?. - cuestionó Leonardo.

- Todo en orden. - Respondió Nathan.

- Prometanme que lo harán con cuidado, por favor... - Pidió Jenni a punto de llorar.

N: Regresaremos a cenar, con Rossely... - expresó tiernamente.

Jen: Los estaré esperando.

Dicho esto, los tres jóvenes se dieron la vuelta para salir del departamento, o al menos, Joe y Leo lo hicieron, pues, Nathan fué detenido por Jennifer, quien lo detuvo y sorpresivamente... lo besó.

- ¿y eso por que fué?. - Cuestionó el sorprendido.

- El zello de la promesa que dice que volverás. - Susurró.

- Bendita sea la promesa. - Y de nuevo... se besaron... ambos habían estado esperando este momento por mucho tiempo, pero ninguno fué lo suficientemente valiente para decirle al otro lo que sentía, hasta el día de hoy, en que la chica se dió cuenta de la forma tan repentina en que puedes perder a la persona que amas... ¡vaya! parece que toda esta tormenta ha dejado pasar un rayito de sol.

Narra Joe

Ibamos los tres en silencio, Leonardo venía alistando lo que usariamos, Nathan conducía y yo, bueno, yo, venía...

'Señor, se que no acostumbro a hablarte y tal véz pienses que solo lo hago cuando realmente pasa algo grave, pero... por favor, apoyanos en esto, permite que todos volvamos a casa con bien, y recuperemos a Rossely... se que lo que haremos no está bien pero entiendeme... así como tu diste la vida por nosotros, estoy dispuesto a dar la mía por ella... ayudanos'.

Todo el camino permanecí observando por la ventana, todo estaba tranquilo, no había mucha gente por la hora que era, los árboles no soplaban mucho aire, había luna llena, unas cuantas nubes cubrian parte de su circunferencia y aunque parecía que nada malo pasaba, para mí, esto era escalofriante.

Nathan se detuvo a una cuadra del central park, yo caminaria solo hasta el lago, mientras ellos esperarian a que por medio de unos auriculares, les avisara que podían acercarse a ayudarme...
Iba a paso un poco rápido, observaba de lado a lado para que no me fuesen a sorprender, afortunadamente no lo hicieron. Cuando llegué al bote que me habían indicado, lo primero que hice fué sacar el papel en donde me daban la dirección pactada, después de leerla, metí las bolsas con el dinero... posteriormente, hice como que caminaba hacia la calle, pero no fué así, lo que realmente hice fué esconderme tras un arbusto, en donde podría ver facilmente la caja, ahí esperaria hasta que llegaran a buscarla. Pasaron 10 minutos para que apareciera un hombre vestido completamente de negro, una gabardina hasta las rodillas completaban su vestuario... 'bonita manera de no llamar la atención', pensé sarcasticamente...

- ¡Chicos, es el momento!. - Con esto, Nathan y Leonardo sabían que tenían que acercarse... por mi parte, cautelosamente fuí caminando hacia el secuestrador, antes, me parcaté de que estuviese solo, para mi suerte, así era.

Después que tomó las bolsas, se dió la vuelta para retirarse, pero lo detuve, cubrí fuertemente su boca con mi mano izquierda mientras que con la derecha apuntaba su cabeza con un arma...

- ¡Si no quieres morir, tendrás que decirme en donde tienen a Rossely!. - Amenacé seguro. Creanme que nunca antes había amenazado de muerte a alguien pero en este caso, la ocasión lo ameritaba, me vale un pepino si voy a la cárcel por matar a un ser humano, si con eso salvo la vida del amor de mi vida, lo haré.

El jóven estaba tembloroso, me imploraba con movimientos negativos con su cabeza que no le hiciera daño... Justo llegaron mis amigos, colocandose frente a nosotros apuntandolo igual con pistolas.

- Te destaparé la boca, pero si gritas o intentas huir, no nos tocaremos el corazón para dispararte, ¿entiendes?. - Expliqué. El asintió...

- Por favor no me maten, les juro que les dejo el dinero pero no me hagan nada... - bueno, para ser sinceros, este pobre se veía, mmm, como les puedo decir sin que suene ofensivo... se ve que es muy...Tonto, así.

- ¿Vienes sólo?. - Preguntó Leonardo.

- Sí... sí... vine en una motocicleta.

- ¿En moto? ¿De verdad? ¿Ahí pensabas llevarte los seis millones?. - Cuestioné sorprendido.

- Fueron las ordenes de Patrick.

N: ¿Patrick?.

- Sí, el jefe...

- ¿Conoces a algún Patrick, Joe?. - Interrogó Nathan.

J: No... no entiendo porque querrían hacerle daño sin siquiera conocerla.

- Ustedes no saben muchas cosas, el enemigo lo tienen muy cerca. - Exclamó el hombre.

J: ¿Qué quieres decir con eso?.

- Cosas...

- ¡¡JOE!!. - Gritó desesperado Leonardo... su mirada estaba detrás de mí, así que mi reacción fué girarme y me topé con un puño pegando en mi cara...

- ¡Dijiste que venías solo imbecil!. - Enfureció Nathan.

- Yo digo muchas cosas... - Respondió burlesco el de gabardina.

'De tonto no tiene nada imbecil'... pensé mientras caía.

Narrador

En ese momento, sacó un arma de la parte trasera de su pantalón, Max y Lucas apuntaban a Nathan y Leonardo y ellos hacian lo mismo. Joe estaba tirado en el piso, el golpe que le dió este último lo dejó un poco noqueado.

- Bajen esas armas. - oredenó Lucas.

- A mi nadie me dice lo que tengo que hacer. - Reprendió Nat.

- No nos esten retando... - contestó Max.

- Lo mismo digo. - Agrego Leo.

Tenían su mirada clavada uno en el otro, así pasaron más de 10 segundos hasta que...

- Se los advertimos... - los secuestradores cargaron su pístola, y de igual manera, los dos amigos... justo cuando Lucas iba a jalar el gatillo Joe se levantó y se dió cuenta de lo que estaban a punto de hacer, así que se avalanzó sobre el y comenzó a forsejear con la pistola intentando quitarsela... esto distrajo a Max, lo que aprovecharon Nathan y Leonardo para arrebatarle el arma...
Después de más de 3 minutos de golpes e insultos, Joseph y Leonardo lograron desarmar a Lucas.

- Ok, ustedes ganan. - Se rindieron.

J: ¡Llevennos con Rossely!.

Luc: - Antes muerto que traicionar a mi hermano.

J: ¡QUE NOS LLEVEN MALDITA SEA!

Despues de ese grito, Max se agachó rapidamente y recogió una piedra, la cual lanzó al rostro de Joe, haciendole una rajada cerca de su ceja... despues de esto comenzaron a correr.

- ¡REGRESEN IDIOTAS!. - Exclamó Leo cuando los tres los empezaron a perseguir... los 5 dejaron las bolsas ahí tiradas, ¿pero saben algo?, no tenían dinero, solo piedras envueltas en papel del New York Times... ¿astuto, no?.

- ¡No disparen, nos guiaran hasta ella! - Pidio Joseph.

Sorprendente e inexplicablemente, los rufianes llegaron a su auto muy rápido, sí, ¡¡AUTO!!, otra mentira descubierta.

Los tres amigos corrieron a la velocidad de la luz hasta el carro de Nathan y así comenzó la persecución... las calles de Nueva York se volvieron en pistas de carreras... ambos coches se pasaban los semáforos en rojo, poco les importaba meterse entre los pocos automóviles que transitaban por ahí.

- ¡NO LOS PIERDAS NATHAN, ACELERA!. - Decía Joe desesperado.

- ¿A donde demonios van?. - Exclamó Leo un tanto confundido, pues la civilización se iba quedando atrás... cuando parecía que abandonarian la ciudad... apareció una casa en medio de la oscuridad... ahí se detuvieron rápido Max y Lucas, y los chicos hicieron lo mismo.

Narra Joe

Vimos como entraron a esa "vivienda", como es obvio, mis amigos y yo bajamos rápido y quisimos entrar, pero desafortunadamente habían cerrado la puerta con seguro... eso no nos detuvo, pues de una patada, la descolgué... y... al entrar, me llevé una desagradable "sorpresa"...

- ¡Si te acercas, la mato!. - Dijo un tercero, supongo que es Patrick, uno de sus brazos rodeaba el cuello de  Rossely y con un arma le apuntaba el vientre... DIOS MIO, ESTO NO PUEDE ESTAR PASANDO... ¡LA IBA A MATAR!

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Gracias por sus comentarios, son las mejores... :')

¡¡¡COMENTEN COMENTEN COMENTEN COMENTEN!!!

Bendiciones, las quiero... xx

lunes, 24 de septiembre de 2012

Capítulo 37 - Luchando por la libertad

Solo dejame ser felíz...

Narra Rossely

Sentir la punta del arma en mi frente hizo que mi vida entera pasara por mi mente, sentí un hueco tremendo en mi vientre, seguro era mi bebé que sentía el miedo igual... mi única reacción fué suplicarle al maldito secuestrador que no me hiciera daño, comprendí que por mis reacciones mi hijo no merecía pagar.

- No... por favor no. - Supliqué. - Estoy embarazada, no dispare.

- Si vuelves a gritarme, creeme que no dudaré ni un segundo en dispararte ¡¿ENTIENDES?!. - Alejó el arma de mí. - ¡Ah! Y tu embarazo a mi me vale un bledo. - Dicho esto salió de ese lugar aporreando la puerta.

- Sí, ya, no lo vuelvo a hacer. - Grité con palabras entrecortadas, realmente sentía mucho miedo, no sabía que hacer, quería que me soltaran, volver a casa, no quería morir ahí.

Narra Joe

Después de una busqueda intensa en todo el parque, Jennifer y yo volvimos a mi departamento, teníamos que tranquilizarnos para organizar muy bien lo que haríamos, o bueno,  esa era la idea de ella, porque yo lo único que quiero es irme corriendo a buscarla, quería encontrarla, tenerla a mi lado de nuevo...

- Tenemos que llamar a la policía. - Dije sin pensarlo. Saqué mi celular y lo hice. Dijeron que mandarían en seguida a un investigador para que pudiera decirle lo que había sucedido con exactitud. Posteriormente le marqué a Nathan y Leonardo para avisarles la terrible noticia, y en cuestión de minutos estaban con nosotros.

- Tranquilo Joe, verás que todo estará bien. - Animó Leo.

- ¿Tranquilo? SECUESTRARON AL AMOR DE MI VIDA, A MI HIJO Y ¿QUIERES QUE ESTÉ TRANQUILO?. - Exclamé fuertemente.

- Por favor Joseph, ese comportamiento no ayudará en nada. - Reprendió Nathan.

- Es que como me piden que me calme... - Comencé a llorar, tenía demasiado miedo de que algo le pudiesen hacer, creanme, moriria. No podría vivir sin ella, no señor, no.

L: Joe, entendemos lo que sientes, pero entiende, tienes que calmarte para poder pensar las cosas, hay que organizar una busqueda...

- ¡ESO! UNA BUSQUEDA, EMPEZARE. - Quise salir corriendo pero ellos me detuvieron.

- YA CALMATE JOSEPH, SI SIGUES ASI, TE GOLPEARE. - Me gritó Nathan.

- ES QUE USTEDES NO ENTIENDEN REALMENTE, DIME LEONARDO ¿QUE HARIAS SI TE SEPARAN DE ESTA FORMA DE NICOLE?.

- Tienes razón pero es que... - en ese momentó, sonó mi celular, no me fijé quien llamaba, solo contesté.

- ¡Que mierda paso! No estoy de humor así que...

- Que grosero resultó señor Jonas. - Era un hombre, una voz desconocida, extremadamente gruesa...

- ¿Quién habla?. - pregunté serio.

- El que tiene a tu mujercita. - Me quedé sin palabras por unos momentos por la rabia que me entró al escuchar eso yla forma burlona en que lo dijo, como si esto fuese solo un juego.

- ¡¡¡¿EN DONDE LA TIENES MALDITO IMBECIL?!!!. - Todos los presentes estaban atentos y estupefáctos ante la llamada.

- Vaya, vaya, vaya, igualito a la perra esa. - Ok, esto fué mucho, sentí como la sangre se me subió a la cabeza.

- ¡NO VUELVAS A LLAMARLA ASÍ, ¿ENTIENDES?!

- Mientras más rápido aprendas a respetarme más rápido te diré que tienes que hacer si quieres volver a ver a Rosselyta. - No dijo más, cortó.

- ¡NO CUELGUES, NO!. - Que furia, que estúpido soy, se que debo entender que necesito tranquilizarme pero es que DIOS, esto es tan doloroso y frustrante que me salgo de mis casillas.

- ¿Qué dijeron?. - Preguntaron todos en unísono.

- Nada, solo confirmó todo, la secuestraron. - Intenté llamar de nuevo a ese número pero no contestaban, 6, 7, 8, 9 veces más y nada.

Minutos después recibí un mensaje, era de ellos.

'Si llamas a la policía, olvidate de ella'... CARAJO ¡¡¡NO!!!

- No quieren que tengamos contacto con la policía. - Expliqué.

- ¿Qué? Pero ya la llamamos, está por venir el investigador. - Acotó Nathan.

- Hay que hablar, decir que ya no vengan, no permitiré que le hagan daño...

- Ellos no se enterarán de que los llamamos... - dijo Leonardo.

- No me arriesgaré. - Entonces volví a localizarme con la delegación y les dije que ya no queriamos sus servicios, al principio se negaron, ofrecian su ayuda a toda costa pero la verdad es que aceptarla solo pondría en riesgo la vida de Rossely.
 
Narrador
 
Al día siguiente 9:00 a.m
 
En el departamento de Joseph parecía que no habían pasado las horas, los 4 amigos seguían en la sala, observando a cada minuto el telefono, orando para que ella estuviese bien y pronto llamaran para saber que hacer y recuperarla... Los únicos que habían logrado conciliar el sueño fueron Leonardo y Jennifer, quien encontró una cobija en los brazos de Nathan, Joe, por obvias razones, no pegó los ojos ni un segundo, estos estaban completamente hinchados y rojos, no veía la hora en que tuviese a su mujer nuevamente a su lado.
 
- ¿Qué quieren que les prepare de desayunar?. - Cuestionó Jenni calidamente.
 
- No tengo hambre. - Contestó Joseph.
 
- Tienes que comer viejo, tenemos que agarrar fuerzas para abrazar a Rossy cuando vuelva. - Animó Leo.
 
J: Agarraré fuerza cuando ella esté aquí de nuevo.
 
Jen: Haré sandwiches y comerás uno, quieras o no.
 
Mientras tanto...

 Rossely tampoco había podido dormir en toda la noche, no solo por el miedo y la angustia, si no por que el hambre no la dejaba en paz, no comía desde la tarde anterior, le preocupaba su bebé, no sabía si esto podía afectarle directamente, además, igual tenía sed, un poco peor.

- Escuchame bien chiquita... - dijo Patrick. - le hablaremos a tu hombresito, necesito que grites, que pidas auxilio... ¿entiendes?. - Indicó.

- ¿Qué? No, no lo voy a asustar así... - Replicó. - Por favor...

- ¿NO HABIAMOS HABLADO YA? TU VAS A HACER LO QUE NOSOTROS TE DIGAMOS. - Tomó un mechón del cabello de la chica y lo jaló fuertemente, provocando un grito de dolor. A continuación, le pidió ayuda a Max y Lucas, sus complices, con la frase 'Si no obedece, ya saben que hacer', asustandola más... marcó el número de Joe para seguir hechandole sal a la herida.

- ¡¡DIGANME QUE ES LO QUE QUIEREN!!. - Contestó.

- ¡Epa! Buenos días señor Jonas. - Respondió sarcasticamente.

- Por favor... diganme que está bien. - Pidió debilmente.

- Si haces lo que te pediremos, ella seguro lo estará...

- ¡DIGANME YA, MIERDA!. - Estas formas de hablar, desesperaban muchisimo a Joseph, con mucha razón.

El jefe hizo una señal a sus compañeros para que actuaran... Max estiró la pierna izquierda de Rossely para que Lucas, con una navaja, cortara un poco del pantalón de mezclilla, dejando un poco de piel a la vista...

 - Ultima oportunidad que te doy para que entiendas que debes respetarme, la próxima, no respondo.

- Dime ya. - Insistió al borde del llanto.

- Quiero 6 millones de dólares. - Expresó al fin.

- ¿Qué? ¡¿SEIS MILLONES?! ¿ACASO ESTAS DE MENTE? NO TENGO ESA CANTIDAD. - Al escuchar eso, Patrick guiñó el ojo, dando a entender a sus compinches que hicieran lo ordenado.
Lucas comenzó a hacerle cortadas a Rossely, y por obvio, esto le dolia demasiado, así que gritaba con desesperación, tenía sus brazos atados y Max le sostenía fuertemente la cabeza, por lo que defenderse era simplemente imposible. Esos lamentos asustaban demasiado a Joe, no sabía que hacer ni que decir, solo gritaba que la dejaran y que no la tocaran más.

- ¡¡JOE JOE, AYUDAME!!. - Pedía Rossy, llorando desesperada.

- Mi amor, mi amor, todo estará bien, te lo prometo... - repetía angustiado.

- Tu decides si la quieres de vuelta, depende de tí, dame el dinero y yo te doy a tu chica. - Sentenció.

- Sí, sí, te lo daré, te lo juro, pero ya no le hagas daño, por favor.

- Tienes hasta mañana para juntarlo, hoy, a las 10:00 p.m, te llamaré para darte ordenes de como me entregaras el dinero. - Explicó brevemente, solo alcanzó a pronunciar un 'Está bien', pues Patrick no permitió más terminando la llamada.

Narra Joe

- ¿6 grandes? ¿enserio?. - Preguntó sorprendido Nathan.

- Sí... - me senté en el sofá a seguir llorando, esta situación me frustraba... - no tengo esa cantidad... - sollocé. - con mi dinero lograré juntar, fácil... 2 millones y medio.

- Bro, nosotros te ayudaremos con el dinero... - Indicó Leonardo.

- Yo, no podré, Joe, tu sabes mi situación económica y no... no tengo nada para darte... - dijo Jennifer al borde del llanto. - Mierda, que basura soy.

- No, no, no digas eso Jenni, no eres ninguna basura, al contrario, eres la mejor amiga que puede existir. - Consoló Nath, dandole un fuerte y cálido abrazo.

Jen: Gracias...

- No me importa quedarme en la ruina, voy a salvar a mi Rossely, cueste lo que cueste. - Advertí.

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¡¡HOLA CHICAS!!

Ay, ya se, me tardé demasiado, pero es que no tenía mucha inspiración, me sentaba a escribir pero no salía nada :l realmente lo siento :3
Pero bueno, aquí está, despues de tanto tiempo, logré terminar el capítulo 37 ajdhjdkfjgldk... Ah, algunas me han preguntado sobre el final de la nove, bueno, quiero decirles que todavía falta un poco para poder decir que se está acabando, así que tranqui que hay para rato jijiji.

¡DEJEN SU COMENTARIO! Gracias, bendiciones, las quiero.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Capítulo 36 - Sufrimiento inmerecido.

Ese afán de hacer sufrir a los inocentes... por un capricho.

Narra Rossely
 
3 días después 3:45 p.m
 
Los planes para hoy eran un poco más relajantes, Jennifer y yo iriamos al central park a pasar la tarde, sería bueno respirar tranquilamente ahí. Para ser más específica, hariamos un picnik... se supone que Joe vendría, pero lamentablemente la empresa de su padre tuvo unos asuntos con las cuentas y la verdad, mi chico tenía el don de entender a la perfección las matemáticas, así que fué a ayudar, quise cancelar esto pero el lo impidió, pues dice que ese sitio era bueno para el bebé.
 
- Trata de hacerlo con cuidado, no vayas a lastimar a mi sobrinito. - Dijo Jenni mientras yo colocaba el mantel de cuadros sobre el verdoso y limpio césped.
 
- Oye, me ofendes ¿sabias?. - Reclamé falsamente.
 
- ¿Qué? ¿Por qué?...
 
- Siento que crees que no soy capáz de cuidar a mi hijo.
 
- Bueno, recordando todas las travesuras que cometiste de adolescente, como cruzar la calle cuando el semáforo estaba en verde o las veces que le dabas 5 vueltas a todo el parque tirando a medio mundo a tu paso... - burló.
 
- Hey, tenía que probarles que soy valiente y sumamente rápida... - Bromeé.
 
Y así comenzamos con nuestra merienda, charlando sobre las anécdotas de nuestra vida, las felices y las no tanto, las malas las dejamos a un lado, no era bueno que me deprimiera en estos momentos, aunque fué inevitable no tocar el tema de Charlie, pues la mayoria de las 'travesuras' habían sido en su compañía.
 
Pasamos el resto de la tarde  así, realmente fué hermoso haber tenido estos momentos con mi mejor amiga, con mi hermana... hasta que nos dimos cuenta que el sol se ocultaria dentro de poco tiempo, así que decidimos comenzar a guardar todo.
Ibamos hacia la parada de los taxis, en esta ocasión, platicabamos sobre algunos posbles nombres que tomaría en cuenta para ponerle al bebé.
 
- ¿Si fuese niña que nombre llevaría?. - Cuestionó.
 
- Me gusta Carly o tal vez Stacy. - respondí.
 
- ¿y niño?.
 
- Si fuese un varoncito, me encantaría o más bien, le pondría como mi padre, Thómas... - Conté con cierta melancolía.
 
- Oh, Thómas es lindo, me agrada la ídea... el pequeño Tom Jonas Evans.
 
- Suena perfecto... - seguiamos caminando cuando nos percatamos de que dos muchachos venían detrás nuestro, y por alguna razón me puse nerviosa, ambos vestían de negro y gafas de sol...
 
- Soy yo o esos nos persiguen. - Susurró Jennifer.
 
- tranquila, deben ser visitantes del parque como nosotras, solo camina. - Tranquilicé. Llegamos a la parada, que desafortunadamente y para colmo, estaba solitaria.
 
Los hombres se pusieron a lado nuestro, uno a lado mio, y otro hizo lo respectivo con Jenni... ahora sí, -esto se pone feo-. pensé.
 
Y se puso peor cuando el que estaba a mi costado puso un arma en mi cintura, mientras que el otro tapó la nariz de Jennifer con algodón, segundos después esta cayó al suelo.
 
- Finge que no está pasando nada, si te mueves, apreto el gatillo. - Ordenó con voz frívola. Mi corazón se aceleró en extremo, estaba alterada, de re ojo veía a mi amiga postrada en el piso y yo sin poder hacer nada... el otro hizo una especia de señal hacia un coche negro, el cual al instante se acercó a nosotros.
 
- Sube al auto. - Exclamó el que había lastimado a Jennifer.
 
- POR FAVOR DEJENME IR. - Pedí al borde del llanto.
 
- QUE SUBAS TE DIGO. - Gritó.
 
Con mi cuerpo completamente tembloroso y mis ojos derramando lagrimas en cascada, obedecí, si no lo hacía, dispararian y moriria... no podía permitir que me dañaran, mucho menos a mi hijo.
 
- ¡NO PUEDEN DEJARLA AHI!. - Agregué al ver que los dos estaban dentro del auto y nos alejabamos dejando a mi hermana inconciente.
 
- ELLA NO ME INTERESA, TU ERAS MI OBJETIVO Y TE CALLAS. - Dijo el conductor, el cual traia pasamontañas, posteriormente le dió uno a los otros.
 
- ¿Qué es lo que quieren? ¿dinero? no tengo, no soy de buena posición económica, por favor, dejenme salir de aquí... - Pedía. Hicieron caso omiso a mis suplicas... con movimientos rápidos, en un, dos por tres ya tenía mis manos amarradas detrás de mi espalda y mis ojos vendados.
 
- Si vuelves a hablar te irá mal, chiquita.
 
- PROMETO QUE NO LEVANTARÉ CARGOS, SOLO SUELTENME.
 
- DIJE QUE TE CALLARAS. - Uno de ellos me soltó una bofetada tremenda, me dolió hasta en lo más profundo de mi ser, esto provocó que mi llanto empeorara y el miedo cada vez era más fuerte que yo.
 
Narra Joe
 
Hace unos 15 minutos que terminé de arreglar unos asuntos de la empresa con mi padre, mismo tiempo en el que le he estado llamando a Rossely pero no me contesta, suena y suenta pero no responde. No tengo otro medio de comunicarme con ella, pues Jennifer no tiene celular... ahora me encuentro rumbo al departamento, en donde habiamos quedado de vernos después de nuestros respectivos compromisos... al entrar a mi hogar, una fuerte presion en mi pecho poco a poco comenzaba a asfixiarme, me costaba trabajo tragar saliva, era una sensasión extraña, a la cual no le tomé mucha importancia, solo me concentraba en seguir intentando marcarle a mi chica... pasaron 20 minutos y nada... ese tapón que sentía en mi garganta era cada vez más insoportable, aumentaba mi desesperación y de repente unas ganas de salir corriendo y gritar llegaron a mí... lo único que se me vino a la mente fué 'Buscala en el central park'.
 
Y así lo hice, gracias a un nuevo auto que mi padre me había comprado hace dos días, pude moverme rápidamente.
 
Llegué a mi destino con un dolor inmenso dentro de mí, solo quería encontrarla ahí, sentía una tristeza y unas ganas de llorar que no tenían fundamentos... me asustaba.
 
- En dónde estas mi vida. - Susurraba para mis adentros mientras estacionaba el coche. Me fijé que al otro lado de la calle, cerca de la parada de taxis, había un circulo de personas, me bajé y me acerqué... los murmullos de todos no me dejaban escuchar con claridad lo que decían... mi reacción ante eso fué empujar a algunos para llegar hasta el centro.
 
- ¿Qué es lo que suce... - detuve mis palabras cuando ví a Jennifer sentada en el piso tallandose su cabeza.  - ¡JENNIFER, QUE TE PASO!. - parecía mareada, le costaba trabajo lograr mantener abierto sus ojos por más de tres segundos, un chico la sostenía y yo lo imité.
 
- Joe... - susurró.
 
- ¿te hicieron algo? y... y... - giré mi cabeza a todos lados buscandola... - ¿en donde está Rossely?. - automaticamente mis ojos se cristalizaron y mi voz se quebrantó. Fué despues de mi pregunta cuando mi amiga se puso normal.
 
- ELLA... ROSSELY... - a como pudo se puso de pié, yo no dejaba de agarrarla, pues no estaba del todo bien... hizo lo mismo que yo, buscó a Rossy con la mirada...
 
- ¡¡¿EN DONDE ESTA?!!. - exclamé.
 
- ¡Se la llevaron Joe, se llevaron a Rossely!. - escupió para después ponerse a llorar desesperadamente.
 
- ¿QUÉ? ¿COMO QUE SE LA LLEVARON? ¿QUIENES?.
 
- Do... dos hombres... se pusieron a nuestro la..do y... - tragaba constantemente, le costaba hablar de la misma desesperación. -  no... no sé... uno me tapó la cara con algodón y algo muy... muy fuerte, dejé de ten..er noción  y después... no... recuerdo más...
 
- No puede ser, no Dios, no puede ¡NO PUEDE SER, MALDITA SEA!. - Grité furioso... olvidandome de que podía caerse si la soltaba... comencé a caminar adentrandome al parque con la intención de buscarla y la esperanza de encontrarla... la multitud que estaba presente me seguía, preguntandome como era, ofreciendo su ayuda...
 
- ¡Es como unos 7 centímetros más pequeña que yo... tiene cabello negro, lasio... piel morena clara... cuerpo delgado... no sé, no se que mas decirles, solo busquenla... por favor, ella es... el amor de mi vida, mi vida entera y... está embarazada, por favor!. - Decía inconsolablemente.
 
Narra Ashley

Me acaba de informar Patrick que ya la tenían en su poder, ahora solo faltaba esperar unos días para que los resultados verdaderos se cumplieran.
Supongo que querran saber como supe y dí ordenes de los movimientos que la mugrosa tendría hoy, bueno, les contaré... acudí a Amy para decirle que un nuevo plan estaba en marcha, solo que esta vez no le dije todo, simplemente me limité a pedirle que le sacara información a Joe sobre su "chica", pues pretendía darle un pequeño susto amenazandola... como es obvio, con gusto aceptó, así que de manera fácil se enteró que Waltter tenía problemas en la presa, por lo que le pidió ayuda a Joseph, quien dejó sola a Rossely, dejandome la oportunidad de cazarla.
En estos momentos me encuentro en el departamento que tengo cerca de Manhattan, según mis padres estoy fuera de la ciudad, en Denver, por un viaje con unos amigos, así que cuando esta bomba explote, nadie podrá sospechar de mí.
Mis complices ya tienen el resto de las ordenes, solamente asustaremos un poco a mi Joesito para después culminar todo... tomen eso como una pequeña venganza por haber embarazado a la mugrosa y no a mí.

Narra Rossely

Estuve escuhando burlas hacia mí y amenzas de golpes por más de 30 minutos, que fué lo que el auto estuvo en movimiento. El camino fué eterno... como seguramente serán los momentos en los que sea su prisionera, Dios quiera que no sea por mucho.

- Después de que estacione el auto, usteds dos se encargaran de la chica, encierrenla y cuidenla bien.  - Mencionó uno de ellos.

- ¿Y tú que harás? ¿te librarás? ¿nos dejarás todo el paquete?. - Cuestionó otro.

- No seas idiota, seré yo quien haga lo más pesado. - Respondió.

- ¿Lo más pesado?.

- ¡BAJENLA AHORA Y DEJEN SUS PREGUNTAS PARA OTRO MOMENTO!. - Ordenó furioso.

El motor del carro se detuvo, escuché dos azotones de puertas, para después sentir como se abrió la de mi lado... una mano jaló mi cabello, haciendo que un fuerte grito de dolor saliera de mi boca.

- ¡Callate niñita!. - El mismo que pronunció esas palabras fué quien me bajó, apuntandome con un arma en mi estómago, provocando que el miedo y el llanto aumentaran considerablemente. - SI NO DEJAS DE CHILLAR, TEN POR SEGURO QUE DISPARARÉ, ASÍ QUE SI NO QUIERES MORIR NI QUE TU MALDITO HIJO TAMBIEN, LO MEJOR SERÁ QUE OBEDEZCAS.

¿Cómo sabían que estaba embarazada? Oh, era obvio que me habían estado vigilando desde hace tiempo, pero ¿porqué? ¿que les hice? NADA, no se ni siquiera quienes son, demonios.

El olor a mugre y a húmedo entraron por mis fosas nasales, no veía nada, pero podía con facilidad, adivinar que este sitio es espantoso.

- Esto es asqueroso. - Murmulló uno de ellos.

- Lo sé, pero todo sea por esos 3 millones de dólares viejo. - Respondieron.

¿3 MILLONES? Esto quiere decir que ¿será lo que pediran por mí?

- ¿¿QUÉ?? ESTAN IDIOTAS, ¿COMO PRETENDER PEDIR TAL CANTIDAD?. - Grité.

- ¿Pedir? No chula, eso será lo que nos pagarán por este trabajito, claro, tal vez le saquemos a tu noviesito otros pocos. -

- ¿Trabajito? ¿Qué me piensan hacer?. - Después de que hiciera esas preguntas, un empujón fué lo que recibí, estuve a punto de caerme pero como por arte de magía, me mantuve de pié.

- Muchas cosas... interesantes, mi vida. - Agregó de manera asquerosa, ustedes me entienden. Luego escuché que aporrearon la puerta, ahora sí, estoy encerrada.

- ¡DEJENME IR!. - Pedí desesperada. - NO LES HE HECHO NADA, POR FAVOR. - Lloraba como loca.

- ¡Callate que tenemos que hacer una llamada!. - Me gritaron. Fué tanto mi coraje que patié la puerta, con la esperanza de que se abriera, aunque en el fondo sabía que no sería así. Lo único que gané fué que me doliera muchísimo... 'que idiota eres', pensé.

Los siguientes minutos me la pasé gritando que me dejaran ir, que me liberaran, pero como era de esperarse, hicieron caso omiso.

- ¿TU NO ENTIENDES POR LAS BUENAS, VERDAD?. - Exclamó uno después de azotar la puerta. Comenzé a temblar porque su voz me indicaba que no había regresado para nada bueno. Retrocedí unos pasos, hasta chocar con algo con mis pies, esta vez no pude balancearme, así que caí sentada, era algo blando y por el ruido que hizo, supuse que era una cama en muy mal estado.

R: ¡alejate!

- A mi no me grites... - Me abofeteó.

- ¡DEJAME IMBECIL! - No sé como pude decir tales palabras, pero fué algo que salió dentro de mí, creo que la necesidad de protegerme, de proteger a mi bebé, hizo que las exclamara.

- ¿Cómo me dijsite?. - Puso una pistola en mi frente. - ¡¡ESTAS FIRMANDO TU SENTENCIA DE MUERTE!!. - Dicho eso, cargó el arma, amenzando con soltar el gatillo y matarme.

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¡HOLA CHICAS!

¿Qué creen? Parece que todo está en contra de mí (?), primero... no podía escribir porque como ya saben, me dejan demasiada tarea en la escuela y cuando este fin de semana parecía que tendría mucho tiempo... ¡BAM! se rompe ACCIDENTALMENTE el cargador de mi PC y mi mamá no me quiere comprar otro porque dice que no cuido mis cosas :( Le tuve que prestar a mi hermano la suya para que pudiese subirles, pero igual, no sé hasta cuando pueda subir de nuevo, de verdad, lo siento :3 De todas formas, estaré escribiendo en una libreta, para que cuando ya tenga en donde publicar, solo lo pase y listo.... ¡porfa, entiendanme!.

Ahora... ¡DEJENME SU OPINIÓN DEL CAPITULO, AQUÍ O EN MI CUENTA DE TWITTER (@RosselyJonas) ¡MUCHAS GRACIAS! Las quiero, bendiciones.<3 xx